¿Crees que eres la oveja negra de la familia?

Si es así , entonces eres la clave  para cambiar los pensamientos, juicios, creencias,     … del clan familiar. Gracias por existir.

 

Ser la oveja negra es un acto de amor al clan

 

Cuando una persona es excluida porque daña la imagen o los valores de la familia (todos hemos oído hablar de la “oveja negra”)  alguien  de  las  generaciones  posteriores  se encargará  de  manera  inconsciente  de  reproducir sus comportamientos e  imitarle, porque en el sistema nada se pierde y tiende a equilibrarse y a hacer  justicia  con  el  excluido anterior,  como  he  dicho, en algún otro miembro, de las  generaciones posteriores.

 

Nadie  puede quedar excluido del clan  y  cada exclusión tiene graves consecuencias. Por ese motivo, la diferenciación entre buenos y malos tal como se la aplica en las religiones tiene efectos devastadores en el alma del individuo. Eso lo demuestra el hecho de que en las familias religiosas a menudo es necesaria una oveja negra que muestra el aspecto negado y que desenmascara la sustentabilidad de la hegemonía de los buenos.

 

Realmente aquella persona a la que la familia excluye y en muchas situaciones maltrata es quien a través de un acto de amor el clan ha elegido al momento de ser concebido como depositario de toda esta información para evidenciar, expresar, manifestar todos los dramas no resueltos, como una oportunidad de liberación para el árbol.

 

Y si te has sentido oveja negra te preguntarás ¿por qué me han tenido que elegir a mi? 

Paradójicamente quizá seas el más fuerte, el que puede llevar ese encargo, el que ha obrado al nacer el más alto acto de amor hacia su familia.

Las llamadas “Ovejas Negras” de la familia son en realidad Buscadores Natos de caminos de liberación para el árbol genealógico.

Aquellos miembros del árbol que no se adaptan a las normas o tradiciones del Sistema Familiar, aquellos que desde pequeños buscaban constantemente revolucionar las creencias, yendo en contravía de los caminos marcados por las tradiciones familiares, aquellos criticados, juzgados e incluso rechazados, esos, por lo general son los llamados a liberar el árbol de historias repetitivas que frustran a generaciones enteras.

Las “Ovejas Negras”, las que no se adaptan, las que gritan rebeldía, cumplen un papel básico dentro de cada sistema familiar, ellas reparan, desintoxican y crean una nueva y florecida rama en el árbol genealógico.

Gracias a estos miembros, nuestros arboles renuevan sus raíces. Su rebeldía es tierra fértil, su locura es agua que nutre, si terquedad es nuevo aire, su apasionamiento es fuego que vuelve a encender el corazón de los ancestros. Incontables deseos reprimidos, sueños no realizados, talentos frustrados de nuestros ancestros se manifiestan en la rebeldía de dichas ovejas negras buscando realizarse.

El árbol genealógico, por inercia querrá seguir manteniendo el curso castrador y toxico de su tronco, lo cual hace la tarea de nuestras ovejas una labor difícil y conflictiva. Sin embargo,

¿Quién traería nuevas flores a nuestro árbol sino fuera por ellas?

¿Quién crearía nuevas ramas?

Sin ellas, los sueños no realizados de quienes sostienen el árbol generaciones atrás, morirían enterrados bajo sus propias raíces.

Que nadie te haga dudar, cuida tu “rareza” como la flor más preciada de tu árbol . Eres el sueño realizado de todos tus ancestros.

 

 

 

Bert Hellinger

 

 

Fuente de la imagen : ciclog.blogspot.com

Autor entrada: Alexandra

Psicoterapeuta - BioNeuroCoach

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